lunes, 28 de abril de 2008

De Tisbea.

¡Fuego, fuego, que me quemo, / que mi cabaña se abrasa! / Repicad a fuego, amigos, / que ya dan mis ojos agua. / Mi pobre edificio queda hecho otra Troya en las llamas, / que después que faltan Troyas, / quiere amor quemar cabañas; / mas si amor abrasa peñas,/ con gran ira, fuerza extraña, / mal podrán de su rigor / reservarse humildes pajas. / ¡Fuego, zagales, fuego, agua, agua! / Amor, clemencia, que se abrasa el alma. / Ay choza, vil instrumento / de mi deshonra, y mi infamia, / cueva de ladrones fiera, / que mis agravios amparas. / Rayos de ardientes estrellas / en tus cabelleras caigan, / porque abrasadas estén, / si del viento mal peinadas. / ¡Ah falso huésped, que dejas / una mujer deshonrada! / Nube que del mar salió, / para anegar mis entrañas./ ¡Fuego, zagales, fuego, agua, agua! / Amor, clemencia, que se abrasa el alma. / Yo soy la que hacía siempre / de los hombres burla tanta. / ¡Que siempre las que hacen burla, / vienen a quedar burladas! / Engañóme el caballero / debajo de fe y palabra / de marido, y profanó mi honestidad y mi cama. / Gozóme al fin, y yo propia / le di a su rigor las alas, / en dos yeguas que crié, / con que me burló y se escapa. / Seguidle todos, seguidle, / mas no importa que se vaya, / que en la presencia del rey / tengo de pedir venganza. / ¡Fuego, zagales, fuego, agua, agua! / Amor, clemencia, que se abrasa el alma. Monólogo de Tisbea en El burlador de Sevilla, Tirso DE MOLINA.





Que siempre las que hacen burla, vienen a quedar burladas.

d.

Inspirar, expirar.

Se fumó la vida y se murió de hambre.
d.

domingo, 27 de abril de 2008

Parque de Atracciones: el viaje.



Lo había imaginado de otra forma; pero ha sido bonito. Un poco duro, creo: hay instantes que no voy a olvidar jamás y detalles que no se me van de la cabeza. Cosas que me han gustado y cosas que no, claro. Una americana con hilos colgando de los puños. La sopa de Algas. Una casa con la puerta abierta. Y un bizcocho. El libro. El café preparado. La mostaza picante. Una banqueta y un micro. Regalos. Las confesiones de última hora: amén. Las chiribitas en los ojos. La humildad. Las copas. El calor. El humo, los humos. El sol. Las noches. La rabia contenida. Una terraza donde entraba la risa contigo. El verbo acoger con las infinitas posibilidades de combinación. Un abrazo de adiós con un tequiero al aire. Me quedo con ellas, porque no son seis nombres, son seis historias - ni más, ni menos - y me han gustado. El abrazo de Laura. La sonrisa de Ana Muñoz. La voz de Ana Gijón. La amabilidad de Clara. La frescura de Nerea. El sentir tan al lado a Analía: cuánto te he echado de menos. ¿Repetimos? Parque de Atracciones es una aventura, no es una antología de jóvenes poetas. Gracias con la boca grande a todos y cada uno de los que me habéis acompañado de verdad.
d.

domingo, 13 de abril de 2008

Parque de Atracciones: noticias previas.

Ya está aquí tan esperado destino: 22 de abril, Zaragoza. Analía Basualdo, Nerea Ferrez, Ana Gijón, Ana Muñoz, Clara Santafé, Laura Tajada y una duenda somos las siete poetas que Octavio Gómez Milián y David Giménez han escogido para este precioso trabajo. Voy intuyendo el impecable resultado. La experiencia os la cuento a la vuelta. Mucho que agradecer y mucho que seguir aprendiendo. Mucha emoción y algunos nombres a los que debo algunas cosas.

Miss Potter.

"Hay algo delicioso en escribir las primeras palabras de un cuento. Nunca sabes dónde te llevarán. Las mías me trajeron aquí: a mi hogar". Helen Beatrix POTTER.

Cuando somos niños, poco nos preocupa quién está detrás de cada cuento de hadas. Nos basta con trasladar esos mundos de personajes hasta la puntilla de la almohada. Cuando crecemos, en realidad también; aunque siempre hay exquisitas excepciones.

d.

viernes, 4 de abril de 2008

Desde aquí se ve mejor el mundo y me encanta lo que veo.


Tenía que ser.
Tenía qué ser.

Acomódame la almohada para contarme las caricias que has callado en cada kilómetro que separa tus estaciones de las mías. Cuéntame esa historia donde las noches no terminan y la música ocupa tus ojos y tus secretos chocan con mis pestañas. Refúgiate en mis brazos espantando la idea de ponernos tierra de por medio algún día. En mis abrazos. Ponte de puntillas y no alcances a ver el horizonte ni tampoco el miedo a juzgarnos sin la certeza de que tus pasos se han confiado a los míos y respetan los ritmos.

No muestres interés fabricado: no hace falta ser poeta para saber que, a veces, el recuerdo es un buen alimento de vida y la memoria un arma de doble filo. Aún soy mayor que tú y conozco el nombre de todas tus heridas. Deja que te abrace. Abrázate en mi abrazo. No te engañes, la física cojea: donde dos cuerpos encajan, hay entropía. Sin pretenderlo pero mereciéndolo, hemos llegado aquí. El silencio me deja coquetear con mis fantasmas cuando estás cerca. No eres tú, es la Realidad quien me seduce. Los muertos tienen sueño: ven, despierta, quiéreme un poco.

Ven. Ven a poner los límites donde yo pongo el juego sin simulacro. Tenía que ser. Ven. Entreténme la piel, baja el volumen, camina despacio, habla menos, sonríe más. No pongas ojitos. No mires, puede que descubras demasiado. Ven. Ven o déjate llevar. No hables, mira. MIRA. Querer, requerir, reír pero contigo. Cuando se te agoten las ideas hablaremos sobre el carbón, sobre las estalactitas, sobre las piritas. O sobre el cuarzo rojo. O sobre una máquina de cocacola que tal vez haya a la entrada de una mina. Hay tantas cosas que me gustan de ti... pero si algo me encanta de tí, es tu abrigo.
Ven.

d.